martes, 12 de mayo de 2009

Ella es




Gordush, gordunushkus, gordunushkunushkus, babycerdo, babygordush. 10 meses. Bipida. Ama la leche. Los MaX Steels de H, la colección de cars de H, su nueva y única muñeca, y subir las escaleras. Arriba, en mi depa, está su parque de diversiones.

6 comentarios:

Lu dijo...

¡Uy qué coshita más lika!
Tola goldita, con sus pedacitos de colita, sus cachetitos, su vestilito losalito.

¡Ay qué monelía!

(Una se pone así de babosa cuando se trata de pequeñas grandes hermosuras)

Es hermosa Lore. Cuidado con la escalera, sólo ponle casco :P

Un abrazo gigante,

Lu
Mamá de DOS chancletas

fashionjolik dijo...

Una de las cosas que hace que me levante a la hora que sea. la amo con verdadera locura espacial.

Patricia dijo...

¿Ella es la verdadera A.? ¡Por fin la conozco!

cibelesdo dijo...

Hola Lorena, hace tiempo te vi en 3g y desde entonces, cuando puedo leo tu blog que está bueno. Tuve a Ignacio hace 4 meses, ya casi 5 y es todo para mí. Al comienzo la pasamos bastante mal. Me gustaría contarte mi historia, pero no sé si te vas a aburrir, correré el riesgo..creo que es algo que se pudo evitar y si lo cuento tal vez evite que vuelva a pasar.
Planeé tener a Ignacio en un lugar llamado "Pakarii", bajo el agua, con una Dra. alemana (Angela) que hace bastantes años vive acá en Lima. Al 8vo mes me dio preeclampsia y pensé que eso me impediría seguir con mis planes, pero Angela me dijo que no era así y que con los cuidados adecuados podíamos seguir con el plan.
Me indujo el parto el 5 de enero, y ese día me levanté sintiéndome rara, no veía muy bien, casi todo oscuro, tenía un dolor bastante agudo en la boca del estómago, mi presión era de 170/100 y vomité 3 veces estando en Pakarii, a media noche se rompió mi bolsa, y pensé que todo ese proceso era normal. Pero a las 4am del 6 de enero, me rendí y decidí pedir la epidural. Angela me llevó al Hogar de la Madre después de que le insistí, pues era lo más cercano y cuando llegamos ahí, ya estaba con 8 y medio de dilatación, demasiado tarde para la epidural. Pujé por 4 hrs y mi bebe nunca bajó. A las 8.30 llegó un Dr. amigo de Angela diciéndome que tenían que hacerme una cesárea porque mi hijito se estaba quedando sin oxígeno y yo desesperada no sabía por qué esperaban tanto. Mi bebe nació y a mi me mandaron a mi cuarto luego de haber estado unas horas en recuperación. Cuando entró el pediatra me dio malas noticias, dijo que no sabían como sería el futuro de Ignacio y que me preparara para lo peor. Una hora después entraron otros doctores preocupados por mis niveles de potasio y me dijeron que el oxígeno no funcionaba y que por eso me tendrían que evacuar a otra clínica. Llegué a la Ricardo Palma a media noche y al día siguiente mi visión se había ido casi por completo, según mis familiares estaba totalmente hinchada y según los doctores bastante grave. Tenía el síndrome de HELLP y me dijeron que muy pocas personas salían de esa. Creo que el hecho de ver a Ignacio (sólo por foto) me dio fuerzas para poder recuperarme, luchar y estar sana para él. El día que salí de la clínica fuí inmendiatamente a verlo, moría por conocerlo y cuando lo pusieron en mis brazos 10 días después de que nos separaron, me sentí la mujer más dichosa del mundo. Con el pasar de los días fui viendo que Ignacio no estaba tan mal como me habían dicho gracias a Dios y que con estimulación se recuperaría de cualquier obstáculo que hubiera podido dejar la falta de oxígeno que tuvo al nacer. Lo que siento que debo contar es que, si mi instinto, o mi dolor en este caso no me hubieran dicho para ir a la clínica en ese momento, es muy probable que mi hijo y yo habríamos muerto en la tina de Pakarii sin nada que hacer. Investigando más acerca de Angela, me di con la lamentable sorpresa de que ya tenía varias muertes fetales y de madres en el poder judicial, que no era médico, que trabaja con este doctor que me operó y que resulta ser uno de los directores de esta clínica el Dr. Foinquinos. A decir verdad, yo no pensé que ella tuviera algo que ver con todo lo que pasé hasta que me puse a leer sobre el síndrome de HELLP y vi que aquel día que me indujeron el parto en Pakarii, presenté todos los síntomas y Angela no me avisó en ningún momento que mi vida estuviera en peligro.
Como te dije creo que esto es algo que tengo que contar porque le pudo pasar a otra, o tal vez no, pero igual así no me quedo con la espina de "si lo hubiera dicho"...
Ahora Ignacio y yo estamos súper bien de salud, estoy sola con él, que me da pena porque para ser sincera me hubiera gustado que un papá formara parte de su vida, pero bueno... tal vez algún día tal vez no...ya se verá. Si te aburrí mucho lo siento, no lo haré más jajaja... y que sepas que tu blog me distrae bastante cuando lo leo por lo bueno que es.

Anónimo dijo...

Hola Lorena, me permito escribirle por aquí a cibeles porque me tocó mucho su historia...siento mucho lo que pasó y me alegro que tu intuición te haya salvado a ti y a tu wawa. Lo bueno es que están bien y seguirán estándolo, lo más importante que podras darle a ignacio más allá de la etimulación será tu afecto y tu ternura, intenta siempre escucharlo con el alma... eso es imprescindible en todo ser humano que está empezando a crecer y florecer... y no te preocupes por lo demás, verás como poco a poco todo se irá acomodando y a pesar de que el papá no esté cerca por ahora él será un niño dichoso. Mientras tú estés cerca de él nada le faltará por que el amor todo lo completa.

fashionjolik dijo...

estoy sin palabras. no se que decir. lo peor de todo es que recien leo este comentario. quiero pedir disculpa por eso. tengo limitaciones respecto a la computadora, de mi oficina no puedo entrar al servidor y en casa no tengo compu. pero me parece genial que me hayas contado esta historia y que asi otras mamas puedan saber cuáles son sus mejores opciones. que suerte y gracias a dios que estás bien,
te deseo lo mejor del mundo.